viernes, 12 de septiembre de 2008

Sexy...

Sexy...¿en qué momento utilizaría esa palabra para que fuera unika para ella? Miro sus ojos nada mas entrar...me atraen como dos agujeros negros sobre un fondo azul celeste...casi me veo sumergido en el mar cristalino cada vez que me atrevo a asomarme a ellos...¿son sexys sus ojos?

Lo siguiente que siento son sus labios recibiéndome...durante estos dias esquivos de los mios...rondandome tan cerca...rozandome de forma tan provocadora que temblaba de excitación...cálidos, suaves, carnosos...mis ganas de morderlos a veces son insoportables...¿son sexys sus labios?

Me abraza...siento todo el calor de su cuerpo traspasando mi ropa...traspasando piel, carne, huesos...siento su calor en mi alma...con ese calor desaparece mi cansancio, me despeja...con mi piel siento toda su voluptuosidad...cada curva pronunciada recorrida por mis manos, suavemente, moldeandola como si de un jarrón de arcilla se tratara...cerrándola a la altura de la cintura...detallando cada centímetro de su rostro...¿es sexy su cuerpo?

Su voz...me recibe aterciopelada, pausada, tranquila...aunque detrás de ella hay alegría, expectación, curiosidad...tanto tiempo sin escucharla tan cerca de mi oido que al hacerlo, cierro los ojos, casi memorizando cada palabra, para luego escucharla siempre que quiera...¿es sexy su voz?


No sé que es sexy...antes que esa palabra utilizo otras para definir lo que sea...al menos no mientras no actúe...pero hoy es mi dia de suerte...ella camina delante hacia su habitación y yo sigo esos pasos que hacen que su trasero se mueva debajo de un camisón para dormir...o para ser arrancado por manos expertas. Me detengo un momento metido en mis propios pensamientos,ella desaparece de mi vista y acudo a su encuentro en su habitación...esta algo inclinada apoyada con los brazos en la cama...y veo sus braguitas tan cerradas en torno a su sexo...que casi son una segunda piel...apenas se esconde de mí.

Pero hoy es cuestion de ir despacio...de recostarme junto a ella...las palabras se acaban, las miradas se pierden, los labios se desean...los cuerpos se atraen...decido escribir una obra literaria con mis manos sobre su cuerpo y ella lo agradece a base de suspiros y movimientos rítmicos de su cadera, los cuales me provocan hasta el punto de sentir reventar mi pantalon con cinturon y todo...pero hoy no he venido a por mí...sino a por ella...

Montada como está, a horcajadas sobre mi, aparto ese camisón y retiro el sujetador...dos pechos aun cálidos, ardientes, rebosantes...emergen ante mis ojos...mi lengua se adelanta a mi mirada y los devora antes...¿sus gemidos son sexys? no lo sé...solo quiero escucharlos sin parar...quiero notar como suben de tono...como se hacen más precipitados...asi hasta que de repente se estremece y deja escapar un pequeño gemido que va creciendo...

Su cuerpo aun se convulsiona a cada roce mío...matandome de placer
¿qué es sexy? todo aquello que le convierte en alguien especial para mi...eso es seria sexy...

(continuará)

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